Ir al contenido principal

POESÍA / HAN PASADO 43 AÑOS





(Oracion a la memoria de mi padre, Manuel Español Sangüesa)

Han pasado 43 años de cuando nos dijiste adiós,
Sigues estando en el interior de mi corazón,
Dia a día iluminas la vida que me va quedando
Y que quieres enriquecer.
Gracias por haber puesto en mi camino
a la mejor compañera con la que hubiera soñado.
Sin ella mi vida no tendría sentido.
Pero en este momento vuelvo la vista hacia atrás
y me siento triste. No lo puedo evitar.
 Son millones los recuerdos acumulados.¿Donde estas?
Mi hermano y yo te necesitamos
La cabeza se conforma como una nube espesa,
 la masa gris es cada vez más oscura.
 Los ojos se enrojecen.
Parecen llegar ecos no deseados.
No quiero entender en mi cerebro difuso y a la vez rebelde.
En mi cabeza hay momentos amargos
en los que solo solo se siembran inquietud y desasosiego.
¿Será que si, será que no? Miro a una pared blanca.
Veo reflejadas imágenes ¿a voluntad propia? Jamás.
Mi mirada se paraliza y las pupilas se dilatan
Ms pensamientos se difuminan en blanco y negro.
No hay figuras, líneas conductoras y concretas.
Tengo ganas de gritar mientras el corazon se agita.
Una tormenta cruel se desata en mi interior.
El desalmado de Tor afila sus armas destructoras
mientras se halla dispuesto a hacer saltar el rayo de fuego,
ese rayo cruel que destroza ánimos y hace llorar.
¿Y a ello le llaman ley de vida?
Hoy he olvidado las risas, mi memoria sufre un inmenso vacio.
Me rebelo hacia mi mismo y en mi mente
comienzo a ver unos mínimos rayos de luz
Grandes nubarrones están a punto de descargar.
No entiendo nada.
Tampoco quiero ya pensar, que poco a poco me diluyo.
Pero noto una luz que quiere abrirse paso,
Desea encontrar las llaves del futuro
Es cuando rige de nuevo tu mano y esa sonrisa celestial
con la que aiempre nos has iluminado.
Y dicen que la vida sigue.
Gracias a ti, papá.

MANUEL ESPAÑOL

Biescas a 2 de agosto de 2018

Comentarios

Entradas populares de este blog

HORA BRUJA / LUNA LLENA EN PRIMAVERA

La luna llena en primavera siempre resulta sorprendente, vista desde donde sea. Crecen las ilusiones, se ven montañas y ríos que atrapan hasta fuera de tus órbitas, mientras la mente se dispara dando vueltas y más vueltas. Ríes, lloras de emoción por lo desconocido que te parece un mundo extraño. Es el poder de la noche que ilumina, aunque no te des cuenta, por fuera y por dentro, y hasta por donde no se ve. Aprovecho esa situación desconocida y comienzo a subir por unos relieves extraños que agitan el ritmo de tus sentimientos. Poco a poco me introduzco en una zona de lagos con ninfas juguetonas y bosques salpicados por seres traviesos que te remojan,  e incluso corceles alados  que saludan desde lo alto de la atmósfera a este alocado terrícola y eterno despistado llamado Gabino.  Y mi cuerpo sonríe, asciende despacio, sin prisas, tan solo superado por la mente quieta y callada, mientras participo de una danza que invita a bailar con la imaginación. Es el...

MONTAÑISMO CARTA ABIERTA / EN EL CORAZÓN DEL EVEREST

Campo base del Everest Querido Javier Oliver Villuendas : Recuerdo, aunque no sé si lo he imaginado, que hace muchos años, no tantos como los de Maricastaña, me cantaban eso de “quisiera ser tan alto como la luna, ay,ay, ay…como la luna”.   Después, cuando todavía estaba en el capacete en los tiempos de balbucear “ajo”, mi padre estaba que se subía por las paredes del Fire; sí, sí, de verdad, yo estaba tomando el biberón. Papá era mi héroe, el único héroe que logró prender en mi por el resto y lo que queda de vida (deseo que sean muchísimos años) un amor inmenso por la montaña y el mundo de la naturaleza. Hoy mi corazón lo tengo en el Himalaya, concretamente, en ese Everest que enamora. Amigo Javi, estás en plena vivencia en el gigante de la tierra, allá donde el Yeti anda escondido y no se atreve a salir, donde en busca de esa cima y pendiente de superar el espolón Hillary, muchos son los aspirantes y escasos los elegidos. Espero que allí rubriques pronto en la c...

HORA BRUJA / MI SUEÑO EN UN CABALLO ALADO

En mi entorno suena la “Gran Polonesa” de Chopin, que me incita a levitar. Ha llegado el momento de los sueños, de dar vida a mi propio mundo, ese que gira y gira y vuelve loca y a veces divertida a la brújula que nunca llego a entender. Sorpresas que da la vida. Me siento en el sofá y apoyo mi cabeza en la parte superior del respaldo, estiro las piernas, me relajo y me excito a la vez en un continuo palpitar. Así comienzan a aflorar mis sonrisas felices que  me conducen a cerrar  los ojos y dejarme llevar en busca de la consecución de la magia que envuelve, de las notas que marcan mi presente. Me encuentro más vital que nunca, pero al mismo tiempo resulta imposible  cortar la afluencia de mis, aunque parezca mentira, “realidades” oníricas. Tengo la impresión de que  he perdido el sentido de la gravedad, sin duda he iniciado un viaje fantástico  a través de un firmamento lleno de puntitos brillantes, pero que ilumina y te mantiene en tensión. Quiero...