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A MI MANERA / HE PERDIDO EL NORTE Y EL SUR

Foto: M.E.


Los rayos cósmicos impactan en las montañas,
Proceden de la luna, mas no les veo.
Es de noche, las estrellas que brillan en el cielo
parece que nublan la esencia de mis retinas.
Miro a un lado, a otro, a los cuatro puntos cardinales
y parece que mi mirada está adormecida.
Mis oídos oyen, pero no escuchan, y parezco ir
por unos caminos que no existen y no tienen fin.
He perdido el norte, el sur, y no sé donde estoy.
¿Qué he hecho para meterme entre tinieblas?
Me doy cuenta de que mi ignorancia es grande
y todo indica que no tengo remedio.
Me resisto, enfurezco, lucho en mi propia contra;
los espacios mentales están llenos de monotonía.
Veo que desaparecen  las tres dimensiones
Ha sido un día triste y mi cerebro se ha estrellado.
Mi palpitar se apaga, mis amigos y amigas,  se van.
Mi forma de ser se altera, ¿pero qué puedo hacer?
Me he encerrado en mi mismo para escapar,
pero no veo la salida a esa presión que me agobia.
Gritaría de impotencia y vibrarían  las montañas.
Siento frío, tirito de frío y las lágrimas se congelan.
Mientras, los rayos cósmicos arañan la tierra,
los oídos están cada vez más sordos;
solo perciben sonidos de alta intensidad
sin articulación posible de palabras
incapaces de escapar de mi interior
que es donde no deben estar.

MANUEL ESPAÑOL

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