Ir al contenido principal

A LA LUZ DEL CANDIL / ME DARÍA DE BOFETADAS


No sé exactamente lo que me pasa, pero hay días en los que me daría de bofetadas. Hoy es uno de ellos. A estas horas previas al sueño, antes de entregarme a los brazos de Morfeo, me he mirado en ese espejo antipático que hay frente a mi, y con la sola iluminación de la luz de mi candil me he llevado un susto que no sabría definir con calificativos que casi diría siento que son irreproducibles. Con mi espejo he mantenido las más destartaladas y a veces insultantes conversaciones. Ahora le estoy mirando y le odio hasta que siento enrojecer los ojos. Evidentemente parezco una montaña rusa con mis estados de ánimo cambiantes. Puedo estar en  lo alto y sentirme el hombre más feliz del mundo, y en un descenso ultrarrápido hundirme en lo más bajo, allá tirado contigo, artilugio repugnante. Pero esto se acabó y quiero levantarme para alcanzar las cimas de la ilusión. Es por eso que te voy a hacer añicos y con toda la fuerza que soy capaz, te enviaré a las cloacas más profundas para que te encuentres hundido en la mierda. Pero aun con todo vayan por delante mis deseos de buenas noches.
Espero que mi próximos espejo no refleje más que sonrisas.


MANUEL ESPAÑOL

Comentarios

Entradas populares de este blog

HORA BRUJA / LUNA LLENA EN PRIMAVERA

La luna llena en primavera siempre resulta sorprendente, vista desde donde sea. Crecen las ilusiones, se ven montañas y ríos que atrapan hasta fuera de tus órbitas, mientras la mente se dispara dando vueltas y más vueltas. Ríes, lloras de emoción por lo desconocido que te parece un mundo extraño. Es el poder de la noche que ilumina, aunque no te des cuenta, por fuera y por dentro, y hasta por donde no se ve. Aprovecho esa situación desconocida y comienzo a subir por unos relieves extraños que agitan el ritmo de tus sentimientos. Poco a poco me introduzco en una zona de lagos con ninfas juguetonas y bosques salpicados por seres traviesos que te remojan,  e incluso corceles alados  que saludan desde lo alto de la atmósfera a este alocado terrícola y eterno despistado llamado Gabino.  Y mi cuerpo sonríe, asciende despacio, sin prisas, tan solo superado por la mente quieta y callada, mientras participo de una danza que invita a bailar con la imaginación. Es el...

MONTAÑISMO CARTA ABIERTA / EN EL CORAZÓN DEL EVEREST

Campo base del Everest Querido Javier Oliver Villuendas : Recuerdo, aunque no sé si lo he imaginado, que hace muchos años, no tantos como los de Maricastaña, me cantaban eso de “quisiera ser tan alto como la luna, ay,ay, ay…como la luna”.   Después, cuando todavía estaba en el capacete en los tiempos de balbucear “ajo”, mi padre estaba que se subía por las paredes del Fire; sí, sí, de verdad, yo estaba tomando el biberón. Papá era mi héroe, el único héroe que logró prender en mi por el resto y lo que queda de vida (deseo que sean muchísimos años) un amor inmenso por la montaña y el mundo de la naturaleza. Hoy mi corazón lo tengo en el Himalaya, concretamente, en ese Everest que enamora. Amigo Javi, estás en plena vivencia en el gigante de la tierra, allá donde el Yeti anda escondido y no se atreve a salir, donde en busca de esa cima y pendiente de superar el espolón Hillary, muchos son los aspirantes y escasos los elegidos. Espero que allí rubriques pronto en la c...

HORA BRUJA / DESPIERTA EN SU PROPIO SUEÑO

El Ebro, con las torres del Pilar al fondo. Foto: M.E. Soltera, muy señora ella, superados los ochenta, doña Paquita es la esencia del alma soñadora. Cree y siente la necesidad del amor que un día se apagó, pero que llegó a crecer con una intensidad abrasadora. Los residuos continúan y allí está ella para dar fe de unos tiempos que siempre se agitan en su interior. La conocí…, mi memoria se encuentra algo diluida…, no diré cuando. Puede que haya muchas Paquitas en el mundo como esta alma sensible que todos los días pasea su soledad, y que habla y transmite a quien le quiera escuchar. La mía es muy especial y de tarde en tarde me encuentro con ella, siempre bien atildada y con los labios rojos dibujando una sonrisa. Habla y canta sola, no importa, no está loca si bien la existencia no deja de ser una locura que cada uno la lleva como puede. Es posible que la vida no le salude como bien merece, pero ella sonríe a la vida, a pesar del letargo que sufre. Es primavera y el verano se acer...